Hoy es el día del orgullo LGTBIQ+. Por ello, desde Bluplanet Web, no queremos dejar pasar este día sin hablar de Alan Turing. Turing es considerado una de las mentes más brillantes del siglo y se habla de él como el padre de la informática actual. Alan Turing murió por defender su libertad sexual y por ello, creemos que es oportuno hablar de esta persona que tanto hizo por la ciencia y por la visibilidad del colectivo homosexual.
¿Quién fue Alan Turing?
Alan Turing fue un matemático, informático teórico, lógico, criptógrafo, biólogo teórico y filósofo. Nació el 23 de junio de 1912 en Londres. Desde pequeño mostró grandes dotes para las matemáticas, pudiendo resolver problemas muy avanzados para su edad, incluso antes de haber estudiado cálculo.
Posteriormente fue a la Universidad de Cambridge, y más tarde a la de Princeton, donde estudió filosofía de las matemáticas y pudo desarrollar algunos de sus proyectos.
Proyectos reconocidos
De él debemos destacar sus dos grandes proyectos más reconocidos (¡a pesar de que tiene muchos más!)
- Bombe: La máquina llamada Bombe, fue la máquina usada por los criptógrafos ingleses durante la Segunda Guerra Mundial. La finalidad de Bombe era descrifrar los mensajes de la máquina alemana Enigma. Esta máquina sustituia letras por carácteres haciendo indescifrable el contenido de los mensajes. Gracias a Alan Turing, el contenido de las cartas cifradas por Enigma fue descifrado. Este gran avance fue determinante para el fin de esa guerra. Del cifrado de mensajes, hablamos en el artículo ¿Por qué deberías encriptar un disco duro?
- Test de Turing: esta prueba consistía en demostrar que una máquina podría tener una inteligencia que replicase una mente humana. El test juntaba a 2 personas, las cuales no se podían ver entre sí, y una máquina. La finalidad era que los humanos consiguen, a través de preguntas, saber cual de sus dos interlocutores era la máquina. Esto es lo que a día de hoy conocemos como ChatBot. Una prueba de ello, si queréis probarlo, es Akinator.
Desenlace de su vida
Lamentablemente, las leyes de la época condenaban la homosexualidad. Él, que se proclamó abiertamente gay y sabía que no tenía que pedir perdón por ello, fue imputado por “indecencia grave y perversión sexual”. En ese momento le dieron a escoger entre ir a la cárcel o someterse a una terapia hormonal de castración química. Turing, como muchos otros, escogió la segunda opción. El tratamiento constaba de inyecciones con estrógenos, que cambiaron su físico, haciéndole engordar, y también le llevó a padecer disfunción eréctil. Muy probablemente, la sustitución hormonal, desembocará en una fuerte depresión.
Alan Turing fue encontrado muerto a los 41 años, envenenado por morder una manzana con cianuro. Se tiende a pensar que fue un suicidio, debido a lo que estaba viviendo tras su condena. Aunque, esta muerte ha dado lugar a múltiples teorías, incluido el asesinato del reconocido matemático.
Finalmente, por respeto a su memoria y a la de muchos otros que fueron injustamente condenados, en 2012, el gobierno británico pidió el indulto para el científico, que en un inicio fue denegado aludiendo a las leyes de la época. En 2012, finalmente, fue la misma reina Isabel II quien le indultó.
En la actualidad, en varios lugares de Inglaterra podemos encontrar monumentos en recuerdo de Alan Turing. En su antiguo domicilio en Manchester, podemos ver una placa conmemorativa, en la Universidad de Surrey pusieron una estatua de bronce y en 2001 se inauguró una estatua en Sackville Park de Manchester. Además, el instituto nacional de ciencia de datos e inteligencia artificial del Reino Unido, fue bautizado como Instituto Alan Turing por este informático tan reconocido en el mundo entero.